
Nada como tener el privilegio de amarte,
nada como estar a tu lado,
nada como oler tu piel,
nada como rozar tus labios,
nada como estar abrazado a tu sonrisa,
nada como estar hipnotizado ente tus ojos.
Tu, regalo que llego del cielo,
cual ángel alado,
suave, aterciopelado, brillante,
muero por estar a tu lado.
No despertar de este sueño pretendo,
detener el tiempo hemos logrado,
siempre juntos, siempre a tu lado.
Nada como tener el privilegio de amarte.